Nacho Aguirre, el cordobés del año, les
pidió a los chicos que se contagiaran
El pasado jueves 8 de Agosto en el Salón del IPEA 220 Ing. Mariano
Frezzi estuvo presente el cordobés del año Ignacio Aguirre.
Bioquímico de profesión y oriundo de la ciudad de Jesús María, es
uno de los creadores de ACES (Adolescentes Contra el Sida).
Con un lenguaje sencillo y directo, con mucho humor y hermosas
experiencias de vida recolectadas a lo largo de 20 años desarrolló
la charla "Prevención del VIH Sida y las Adicciones".
A partir de toda su experiencia pudo cautivar a más de 150 jóvenes
de nuestra localidad de la IPEA 220 Ing. Mariano Frezzi, Puertas del
Sol, Ipet 54, Colonia Videla e Impira.
Una palabra puede torcer la historia
Nacho, como le gusta que le llamen a él comenzó la charla con una
frase que le cambió la vida: "En los próximos años Occidente
asistirá a la africanización de la epidemia del VIH", pensó: "Cuando
a mi hija se le despierte el aborigen o el indio tengo que hacer
algo".
"Tengo que picarles la cabeza" como dicen ustedes pero en otro
lenguaje. Tomó el modelo de las trabajadoras sexuales de África.
"Las que sabemos de la realidad y cómo comunicarnos con las mujeres
somos nosotras".
Entonces acá en Argentina y en Córdoba lo que tenemos que hacer es
que sean los chicos lo que les cuenten esto del Sida a los mismos
chicos. Porque el consejo de un amigo tiene mucho valor
Los alumnos junto a los docentes vieron un video donde un chico y su
padre están en una situación difícil para “hablar de todas estas
cosas”. Al final, es el pibe el que termina hablando de todo esto y
hasta incluso entregándole un preservativo.
Aguirre señaló en reiteradas oportunidades que "Esta enfermedad
tiene mucho de discriminación en la cabeza de la gente. Sin embargo,
el virus no discrimina ni edad, ni clase social, ni religión".
En la sociedad todos tenemos el pensamiento: Las cosas le suceden a
los demás. Les pasa a los pavos, a los tontos.
Destacó que los jóvenes están llenos de vida tienen que animarse a
bajar de la tribuna y jugar el partido, meterse a la cancha "Ustedes
pueden y deben ser parte de la historia".
Educación para la salud y drogas
Dentro de la charla también se tocaron temas de Educación Sexual
Integral o de Educación para la Salud como el la llamó.
No es cuestión de "darle masa solamente" como suelen decir los
adolescentes. De tener contacto con nuestros órganos sexuales. Eso
es genitalidad y está lejos de ser una sexualidad plena e integral.
Hay un cuento que es muy discriminatorio y encierra falsas ideas
¿Qué hace una mujer o un hombre después de tener relaciones
sexuales? Estorba. De allí surgen muchas reflexiones. En realidad si
uno hace el amor y comparte su cuerpo y su espíritu con otra persona
jamás puede estorbar. Cuando le damos masa somos solo genitales.
Cuando compartimos nuestro sexo con nuestra pareja, somos personas.
También habló de la droga y fue categórico. “La droga es una
porquería. Te agarra del cogote y no te suelta” Te quita tus dos
tesoros más importantes: por una lado la libertad de elegir y
conjuntamente la salud para poder tener una vida plena
En el caso de la droga y el alcohol la pregunta es ¿Quién consume a
quién? Cuando tomas alcohol, maneja el vaso y cuando te drogas ella
te va consumiendo a vos.
En el caso de este síndrome VIH uno de los problemas más grandes es
la discriminación. Ya que ella no para pero le quita vida a quien
tiene sida. La peor de las muertes es la muerte social que muchas
veces tiene que vivir una persona que tiene sida
Es importante SABER, Pero más importante es ACTUAR
"Ustedes" tienen que actuar, tienen que hablar con sus papas, tienen
que decirles yo se que ustedes me quieren y me van a ayudar.
Ustedes son los Soldaditos de la vida.
Contagiate de…
Al final de la charla les solicitó como contrasentido a todo lo
expuesto sobre el VIH que se contagiaran… ¿Se preguntarán de qué?
"De compromiso, de responsabilidad, de solidaridad. Por favor
contagia al resto de otros. Contagia a todo el mundo de abrazos."
El Centro de Aprendizaje Universitario y la Cesopol agradece a este
profesional de la salud por compartir tan grato momento y lo invitó
a seguir trabajando
Dentro de los principales temas trabajados por Ignacio Aguirre los
chicos tienen que ponerse manos a la obra y pueden comenzar con este
folleto:
Promo Celulares Corporativos de Oncatel
Espacio
de anécdotas y relatos
Desde la Comisión de los 60 años de la Cesopol se invitó a
los asociados y las instituciones que se sumen a contarnos historias
o vivencias en relación a nuestra Cooperativa. Muchas Gracias a
todas las personas que nos enviaron sus mensajes. Algunos de ellos
los queremos compartir con ustedes…
¿Es posible imaginar una casa sin electricidad, sin computadora, sin
equipo de música, sin televisión y sin gozar de todos los avances
tecnológicos? Sólo algunos mayores conocemos estas experiencias por
haber vivido en hogares donde faltaba la luz. En las noches
veraniegas, sentados al frente de casa, abanicando el estío,
iluminados por la luz de las estrellas y acompañados por el canto de
la brisa entre los árboles, dejábamos pasar el tiempo, soñábamos. Al
atardecer preparábamos todos los artefactos que por la noche nos
alumbrarían. El tacho lleno de kerosene no debía faltar en las
viviendas. El predilecto de la casa era el “sol de noche”, por la
intensa luz que emitía, a los costados tenía dos orificios: una por
donde se llenaba el depósito de combustible y el otro tenía un
inflador, que, aproximadamente cada hora se bombeaba para que diera
mejor luz; tenía designado un lugar estratégico en la casa, colgaba
desde el techo aferrado a un alambre con la punta en gancho, y desde
allí iluminaba todas las habitaciones. Lámparas más pequeñas se
prendían al acostarse, con mechas embriagadas de kerosene, que se
debían mantener parejas para que alumbraran mejor y no ensuciaran de
negro el tubo de vidrio que las cubrían. La heladera, acomodada en
un rincón de la cocina, debía completarse, cada tres días, con el
kerosene, también tenía una mecha que debía ser nivelaba ya que si
no la casa se llenaba de humo negro y hollín. La calefacción era:
estufas a leñas, o a kerosene, o con braseros. En la cama no faltaba
una botella con agua caliente, o un ladrillo puesto sobre las brasas
y mucha, mucha ropa de lana. En los largos inviernos, todos los
lunes, con las manos entumecidas, sacábamos las prendas del
lavarropas, un artefacto de amplias dimensiones, que contaba con una
caldera cuyo combustible era el gas de una garrafa conectada a la
parte posterior y que movía las paletas emitiendo un sonido fuerte,
con golpes que parecían latigazos contra el piso, para luego
colgarlas en los alambres, enarbolados por los aires. Corría la
década del 60 y la gente que vivía en los campos era muy numerosa.
La luz fue un objetivo de muchos vecinos. Así comenzaron las
gestiones con gerentes, instituciones. De todos estos trámites nace
un gran proyecto, electrificar la zona rural de Oncativo, Oliva y
Manfredi, plan que fracasó. Algunos productores siguieron con este
ideal como, don Duilio Ciccioli, Luis Vottero y Miguel Petoletti,
que no cejaron en sus intentos, y de tanto insistir, consiguieron
que la Cooperativa Eléctrica de Oncativo llevara a cabo las obras.
Se gestionó un crédito del Banco Provincia de Córdoba, Sucursal
Oncativo, se comenzó la obra que partía desde la Fábrica SCORZA,
lindando la ruta, pasaba por el primer campo, perteneciente a una
familia de la Ciudad de Córdoba, para adentrarse en la propiedad del
“Gringo” Vottero y luego continuar hacia el norte, hacia nuestro
hogar, previo atravesar el campo de Granatelli y el establecimiento
de gallinas ponedoras de Biondini y Seco. Una fría mañana de junio
del año 1969 el camión dejaba al costado del camino los postes,
comenzaban los trabajos ¡Era una realidad, no soñábamos! Conocíamos
todos los movimientos desde sus inicios, los empleados, cada poste
que se paraba. Asomados a nuestras ventanas fuimos testigos
apasionados de los avances y de nuestro propio futuro. Don Alejandro
Aguada, jefe de redes a cargo de la obra de la línea troncal y de la
derivación a los domicilios; nos contaba: “Hacía mucho frío ese
invierno, prendíamos fuego en las cunetas para poder calentarnos;
cuando a lo lejos aparecía la renoleta de Petoletti, que nos traía
una pava grande con café, acompañada con pan y chorizo. ¡Cómo lo
esperábamos para calmar el frío!” A Don Alejandro le pregunté: si a
esta historia le ponía de título “Pioneros de la Electrificación
Rural de Oncativo” y él respondió que sí, ya que fue la primera
línea rural que hizo la Cooperativa y cinco familias fuimos las
beneficiarias. En nuestra vivienda instalamos luces por todos los
rincones, a los costados de la casa, en los galpones, una potente
luminaria en el parque, donde mis hijos jugaban en las noches de
verano. ¡Vendría la gran inauguración! La fiesta en Campo Ciccioli,
con la visita de diferentes autoridades, como el director del INTA
Manfredi, el Gerente de la Cooperativa Eléctrica de Oncativo, el Sr.
Jaluf. El Intendente de Oncativo, Ing. Montironi. El gerente del
Banco Provincia de Córdoba, Sucursal Oncativo, personas que se
involucraron para que este proyecto de electricidad rural fuera una
realidad. Además de colonos, amigos, familiares que vinieron a
compartir nuestra alegría, y futuros usuarios del servicio,
contagiados de lo que ya se estaba viviendo. El festejo duró todo el
día, con almuerzo, guitarreada y baile. A la noche, en plena
milonga, un travieso corta la luz por un momento… fue muy risueño y
aplaudido. En cada oportunidad que recorro al campo, caminos
lugares, recuerdo episodios vividos… y siempre están ellos, los
postes, atravesando los lotes, ellos, los que encierran una
historia. Están allí, erguidos, rígidos, detenidos, esperando tal
vez, el paso el tiempo…
Esther Vottero de Petoletti |